Todo cambio empieza por una transformación cultural

01/07/2022

#CompromisoTodoElAño   # SemanadelOrgullo

 

Por Vanesa Vázquez, Gerenta de Crecimiento Inclusivo y Sustentabilidad de Cervecería y Maltería Quilmes

 

Las fechas conmemorativas y efemérides nos ayudan a frenar y dedicar un día, a rememorar, celebrar, reflexionar, en medio de una realidad que es cambiante y veloz, en la que los temas entran y salen de la agenda, a veces, con la velocidad con la que se actualizan las tendencias en Twitter.

Momentos como el Mes del Orgullo LGBTIQ+, en el que el colectivo a lo largo de todo el mundo se une para celebrar su libertad y visibilizar sus derechos, o el 17 de mayo, en el que conmemoramos el Día Internacional contra la Discriminación por Orientación Sexual, Identidad de Género y su Expresión, sirven para visibilizar y para recordarnos que todavía nos queda mucho por hacer durante el resto del año.

El festejo y la memoria tienen que ir de la mano de iniciativas concretas que aporten a construir igualdad, para que cada nuevo Mes del Orgullo podamos también celebrar un nuevo avance como sociedad cada vez más inclusiva. El trabajo tiene que ser continuo y sostenido.

Si bien vemos nuevas propuestas de diferentes sectores que manifiestan su apoyo a los derechos LGBTIQ+ y el respeto a todas las orientaciones sexuales e identidades de género, lamentablemente existen cifras que nos marcan que aún tenemos un largo camino por recorrer.

La consultora Nodos, que desarrolla actividades efectivas a favor de la diversidad e inclusión, publica cada año la encuesta «Ser LGBTIQ+ en el trabajo”. Los resultados del último estudio muestran que el 30% de los encuestados manifestó haber sufrido acoso y discriminación en el trabajo, el 50% haber recibido comentarios negativos y bromas vinculados a su orientación sexual, el 20% sufrió violencia física o verbal y el 7% reveló haber sido despedido a causa de su orientación sexual o identidad de género.

En Cervecería y Maltería Quilmes entendemos que todas las personas que conforman una organización son diversas en múltiples aspectos, y que gestionar esas diferencias sin tener en cuenta a la diversidad sexual y a las identidades de género no es opción.

El Orgullo implica poder expresar cómo uno se siente, vestirse como uno elija, nombrarse y ser nombrado de acuerdo con cómo uno se identifica, elegir el baño que quiera usar, poder compartir las actividades realizadas durante el fin de semana, hablar sobre su pareja, o solicitar la licencia correspondiente. No tener acceso a todo lo anterior en el ámbito laboral implica no poder sentir orgullo en cada espacio que uno habita y en cierta forma, invisibiliza las identidades de las personas.

En esta línea, nos comprometimos a generar un entorno de trabajo en el que todas las personas seamos respetadas, aceptadas, y valoradas para lograr nuestra mejor versión a través de Autenticidad, nuestro programa de Diversidad e Inclusión, porque entendemos la autenticidad como un valor de realización de las personas, que las hace sentir cómodas consigo mismas, para que también puedan sentirse cómodas al conectarse con su entorno.

Trabajamos en tres ejes: “Respeto”, porque sin respeto todo lo demás carece de sentido, buscando un espacio en el que las personas no sean juzgadas, sin comentarios ofensivos, ni nada que le impida ser una persona auténtica; “Sin Etiquetas” promoviendo un ambiente libre de prejuicios, donde nadie clasifique a las personas para que podamos desarrollar nuestra mejor versión; y “Orgullo”, porque el orgullo por lo que somos nos fortalece, las diferencias se valoran y nos unen mucho más.

La implementación de un Protocolo de Transición de Género, para acompañar a quienes estén atravesando una transición de género, o cursos de identificación y eliminación de sesgos en los procesos de selección, son los resultados de nuestro aprendizaje que se materializó en iniciativas puntuales, para seguir evolucionando en nuestra cultura corporativa y lograr una transformación real.

En este camino, el mejor apoyo que podemos tener las compañías es el trabajo colaborativo junto a expertos para asesorarnos y contar con las propuestas de actores que tienen una mirada externa, con perspectiva, para poder medir, aprender y hacer.

Todo cambio empieza por una transformación cultural, un camino hacia una nueva forma de ver y hacer las cosas. Se trata de construir nuevos símbolos y rituales, además de derribar mitos y estereotipos. Sabemos que aún existen en la sociedad muchos miedos, preconceptos, estereotipos y prejuicios. Como compañía no somos ajenos al contexto de nuestro país con relación a la inclusión y la diversidad y queremos asumir la responsabilidad de acompañar a las nuevas generaciones a lograr el cambio cultural que tanto necesita nuestra sociedad. Por eso, para lograr esta transformación debemos tener un rol activo, no podemos esperar.