28/07/2021
#LosExpertosDicen
Por Diego Fernández, Secretario de Integración Social y Urbana Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
La integración de los barrios populares es una política fundamental. Sólo en Argentina hay más de 4.400 barrios y asentamientos informales. Estamos hablando de miles de personas, vecinos y vecinas de a pie, que no tienen acceso a cuestiones esenciales como el agua potable, a escuelas y centros de salud y mucho menos a empleos formales, a la oportunidad de emprender o de capacitarse para desarrollar una carrera profesional. Estas realidades generan espirales de pobreza estructural difíciles de romper.
Para lograrlo y nivelar la cancha entre los barrios populares y el resto de las ciudades es necesario implementar soluciones integrales. Hoy no alcanza con obras de infraestructura o viviendas nuevas. Hacen falta también escuelas y centros de salud, políticas de desarrollo comunitario y por sobre todas las cosas, la clave para una integración sostenible: políticas enfocadas en el desarrollo económico.
En este sentido, uno de los aprendizajes más grandes que tenemos desde que comenzamos a trabajar en el Barrio Mugica de la Ciudad de Buenos Aires es que desde el Estado podemos implementar políticas públicas de gran impacto, pero que frente a grandes desafíos necesitamos soluciones innovadoras que nos involucren a todos. La participación del sector privado es, sin lugar a dudas, una de las claves. No desde la solidaridad, sino como parte activa del armado de las políticas públicas. Estado, comunidad y privados en conjunto.
En el Barrio Mugica trabajamos con más de 120 empresas de una amplia variedad de rubros e industrias. Algunas de ellas ofrecen cursos y capacitaciones a vecinos, otras vinculan al barrio con el mercado laboral formal, otras apoyan iniciativas particulares o colectivas, cómo el caso delrecoveco.com, y otras también trabajan para instalar sucursales en el barrio, como ya lo han hecho Santander, Río Uruguay Seguros y Arcos Dorados, por nombrar algunas.
Esta participación es estratégica para todos los actores, las empresas generan un impacto positivo fundamental en los barrios y también dentro de sus organizaciones, permiten el trabajo y la articulación entre el sector público y el sector privado y, además, profundizan los vínculos y la integración de los barrios y las ciudades. Estoy convencido de que solo así, trabajando juntos, podremos afrontar los grandes desafíos de la Argentina.